Amores de filósofos
Günther Stern (más adelante adoptaría el pseudónimo de “Anders”) se declaró a la joven Hannah Arendt en un baile de máscaras. Fue en Berlín, en 1929. Él era doctor en filosofía desde 1924, y ella —también filósofa— preparaba su tesis doctoral sobre el amor en San Agustín. Como buen kantiano, Stern la “conquistó” formulando un pensamiento enigmático para los no iniciados, le dijo que “amar es el acto por el que convertimos algo a posteriori—a saber: ese otro al que conocemos accidentalmente— en un a priori de nuestra propia vida”. Poco después se casaron por sorpresa en una ceremonia civil, sin la asistencia de padres ni invitados. Los dos estaban enamorados: él, de ella; ella, de su antiguo profesor Martin Heidegger.
Las conversaciones que recreó Anders de memoria dan idea del ambiente en el que vivía aquella pareja de intelectuales noveles, rodeados de libros y conversando sin cesar. Se ve, no obstante, que Anders, aunque admira a Hannah y elogia su belleza, su inteligencia y autonomía, parece ser quien
llevaba la voz cantante: cuatro años mayor que ella, ya doctor y enfrascado en la elaboración de arduos estudios de antropología filosófica, se crecía delante de su esposa, a la que también parece reprocharle en secreto su amor por Heidegger y el empleo de su jerga. No sabía entonces que ella volaría de su lado para seguir su propio camino como pensadora: la llegada de los nazis contribuyó a ello en unos años en los que la supervivencia intelectual se volvió tan necesaria como la física.
Pero si las conversaciones parecen más bien anecdóticas, el ensayo de Christian Dries que las compaña —y que da cuerpo a este libro estupendo y muy bien traducido— es utilísimo para cualquiera que desee ahondar en la relación de Stern y Arendt, poco tratada en las conocidas biografías de la autora de La condición humana. Situándose más en el punto de vista de Anders que en el de Arendt, el biógrafo nos relata algunos pormenores de la frustrada relación sentimental, y el relato es melancólico y hace reflexionar sobre la vida, sus ilusiones y sus fracasos: Günther Anders fue sólo un episodio en la existencia de Arendt, lo mismo que ella lo había sido en la de Heidegger; pero dichos “episodios” tuvieron consecuencias inesperadas en ambos casos y cimentaron uniones que sólo la muerte finalmente separó.
Günther Anders. La batalla de las cerezas. Mi historia de amor con Hannah Arendt. Con un ensayo de Christian Dries. Günther Anders y Hannah Arendt: esbozo de una relación. Editado por Gerhard Oberschlick. Traducción de Alicia Valero Martín. Paidós, Barcelona, 2013, 158 páginas, 18,90 euros.
..........................................
LUIS FERNANDO MORENO CLAROS se doctoró en Filosofía con la tesis Platonismo en la filosofía del joven Schopenhauer. Traductor de E.T.A. Hoffmann, Nietzsche o Goethe, fue coordinador de la Biblioteca de Grandes Pensadores de la editorial Gredos. Es autor de las biografias Schopenhauer. Vida del filósofo pesimista (Algaba) y Martin Heidegger. El filósofo del ser (Edaf). Ejerce la crítica literaria en Babelia, el suplemento cultural de EL PAÍS.
..........................................
Artículo publicado en Babelia, suplemento cultural de EL PAÍS, el 27 de abril de 2013.
TOMADO DE: http://blogs.elpais.com/tormenta-de-ideas/2013/04/amores-de-filosofos.html